Lo primero que haremos para elaborar el slime es verter el jabón de manos (líquido) en un bowl.
Luego agregamos la maicena poco a poco, puedes probar primero con dos cucharadas y mezclar muy bien hasta que se integre con el jabón, luego agregar dos cucharadas más y repetir hasta obtener una masa un poco seca con una consistencia irregular.
En seguida agregamos el aceite, también de dos en dos cucharadas, mezclando enérgicamente hasta obtener la característica consistencia del slime.
Por último, se agregan unas gotas del color de tu preferencia e integras con las manos. La intensidad del color depende de la cantidad de colorante que agregues.
Y ¡listo!
